El conocido como Canyon of Heroes ha acogido el triunfante recibimiento a los héroes de la Super Bowl.
Un variopinto gentío se ha congregado en torno al recorrido tras hacerse con todo el equipamiento necesario para rendir honores a los "Big Blue".
Y de paso enviar algún recado que otro a los grandes derrotados (la ciudad de Boston y la principal estrella rival, Tom Brady).
El desfile se ha hecho de rogar, así que apenas vislumbrados los primeros movimientos han estallado los esperados cánticos, amplificados con megáfonos en los casos más afortunados (o menos para quien tiene que sufrirlos al lado de su oreja).
Los primeros en aparecer han sido fotógrafos y esposas de los jugadores, por lo que la recomendación espontánea ha sugerido guardar el confeti para más adelante.
Al menos hasta la llegada de la carroza principal, donde viajaban el trofeo y el MVP del partido, Eli Manning.
Los jugadores han desfilado escalonadamente.
Este grupo se ha visto sorprendido con la lluvia de un balón desde la muchedumbre.
Como ocurrió con la final, el desfile también ha tenido amplia cobertura mediática.
Al término, quien ha querido seguir el festejo tenía fácil encontrar un buen refugio donde hacerlo.
Sin duda más de uno habrá caído en la tentación, aparcando por un día las obligaciones de turno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario