viernes, 17 de junio de 2011

The Cloisters

Si hay un lugar dentro de Manhattan en el que abstraerse de la urbe y acercarse artísticamente a Europa puede que la respuesta esté aquí. En los Cloisters (o claustros).

Son una expansión del Museo Metropolitan ubicada en el extremo noroeste de la isla de Manhattan, en medio de una gran zona verde a orillas del río Hudson conocida como Fort Tyron Park.



Al llegar al emplazamiento, en vez de pisar suelo neoyorquino, lo que parece es avistar un paisaje más propio por ejemplo de la cornisa cantábrica.




Construido en los años 30 del siglo pasado, alberga partes de viejos monasterios españoles y franceses, además de frescos, tapices, cuadros y otros ornamentos del medievo europeo.


La posibilidad de disfrutar de este espacio se debe al cabeza de la familia Rockefeller , que donó la mayor parte de las piezas.

Como el ábside de una iglesia de Fuentidueña (Segovia), un fresco traído desde Lérida o incluso tumbas de nobles hispanos.



Y luego están los claustros que le dan nombre. Reproducen el espíritu de estos lugares de oración y meditación y cuentan también con muchas piezas arquitectónicas originales.




Los árboles y plantas aromáticas que cultivaban los monjes también intentan ser imitados.




Historia medieval en un país con menos de 250 años de existencia real.

Una curiosa combinación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario